18 marzo 2012

Marzo 2012


Francisco Gabriel Juárez

Marzo 2012:

Te escribo con los ojos cerrados, con mi cabeza hacia mi ventana, desde la cual sopla un viento leve, tan sutil que solo el movimiento de la cortina lo delata. Las estrellas no se han hecho presentes esta noche, un cielo oscuro y gris nos invade, a lo lejos los arboles dibujan siluetas que rompen el cielo, lo desgarran. Para pensar en ti debo ver al cielo, no hay otro modo de que te hagas presente, para acercarme a ti debo recordar solamente, debo retroceder un par de años. Para platicar contigo debo simular que soy más joven. Siempre seré joven para ti, y tú para mí. Este yo que hoy te escribe nunca lo conocerás, para ti soy irreal, imposible.
¿Tu voz?, claro que la recuerdo, ¿tu rostro?, sigue siendo el mismo.
¿Por qué no has vuelto a visitarnos?, hace mucho que te fuiste. Te extrañamos mucho.
¿Tus hijos?, están todos bien, casualmente los veo pasar por el callejón y nos saludamos fríamente. Que se le va a hacer, la vida continúa y la distancia se hace más grande. Sin embargo contigo es distinto, solo debo cerrar mis ojos, ver hacia mi ventana y ser un poco más joven. Cuéntame, ¿Cómo has estado?
¡Un fuerte abrazo!
Francisco.
P.D.
Brilla un poco más fuerte, las nubes grises no me dejan verte.

No hay comentarios: