Por Maria Fernanda Sandoval
más no a todos provoca cantar.
Los sonidos se hicieron silencios,
para nosotros que olvidamos amar.
De qué sirvió nuestro amor de mentiras,
desenlace sin puntos finales.
Qué te dejó mi poesía y mi vida,
si ahora son palabras y frases banales.
No aprendí a robar tiempo al tiempo,
no voy a enamorar al desamorado,
me cansé de inventar el momento,
no podemos vivir del pasado.
La canción que cantamos un día,
comprendamos, no nos va a durar.
Las caricias, las risas, los besos,
son mentiras, ya no nos hacen cantar.
1 comentario:
Este poema tiene por momentos rima y por momentos no. Eso no le quita musicalidad.
Sinceramente leerlo no me gustó, pero mientras lo leía me imaginé escucharlo en una canción pop y bueno, así sonaba muy diferente. Es muy musical. Póngale música, cántenlo, con el ritmo que se les ocurra, no lo "lean", y verán que tiene ese efecto.
Es muscial pero no tiene un ritmo propio, sin embargo, sí tiene el potencial para adaptarse a uno.
Podrías ser una buena escritora de letras musicales. Eso es admirable.
Publicar un comentario