15 octubre 2011

Vida y obra de un sueño

Por Francisco Juárez

¿Dónde está el cerezo?, ¿la mañana?, ¿los días que fueron o pudieron ser?
se disuelve todo entre nuestras manos, entre la memoria o el olvido,
la eternidad guardará aquello que fue y no será, los días juntos
y las noches de estrellas, la lluvia sobre nuestros rostros.

Una historia o un sueño podría ser,
tantos deseos, aquello que comenzó en la mañana y continúa en el ocaso,
ahora solo en la contemplación de la memoria o la imaginación.

Somos un sueño que se quiebra bajo el sol,
somos la ola que pega contra la roca,
una constante desilusión, apenas unas gotas
llegan a la orilla, pero en esas gotas todo el mar.

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He creado éste corto poema, tratando de guiarme por el estilo reflexivo de Tomas Tranströmer, ya que a mi parecer
a través de sus líneas reflexiona la realidad del hombre contrastándola frente al mundo que le rodea.
Así, he podido leer varios poemas escritos a través de su vida y me he percatado que utiliza frecuentemente
al sol, las piedras y la naturaleza en general para ambientar sus espacios de reflexión.

Así pues, es como en éste ejercicio trato de reflexionar en la realidad del hombre en su búsqueda de alcanzar sus
sueños utilizando ése estilo de prosa poética que utiliza el flamante Premio Nobel.

Espero que ésta aproximación a su estilo no sea del todo errónea y haya rozado, aunque fuese de manera ínfima,
el estilo depurado de Tomas Tranströmer.

3 comentarios:

Astrid Avila dijo...

Me gustó mucho el poema pues también nos hace reflexionar sobre la rapidez con la que vivimos y cómo todo va quedando en el pasado como recuerdos y logros alcanzados.

JuLio Urízar dijo...

Que bien utilizás los elementos de la naturaleza para expresar la nostalgia por lo pasado y la angustia de pensar lo efimeramente minúsculos que somos, lo pasajero de nuestra existencia a mitad de la eternidad, que sólo somos las gotas de un océano, pero que aún así, en esa gota va todo el mar que hemos sido (esos últimos versos son especiales) Este poema es una gota de ese interior oceánico que hay en vos. Muy poético. Me gustó mucho. Realmente es un estilo muy reflexivo.

Francisco Juárez dijo...

gracias a ambos por sus comentarios!!! todo un honor!!!