15 noviembre 2011

Carta

Guatemala, 14 de noviembre de 2011

Querida Caverna:

En ti he podido depositar mis pensamientos, transmitiéndoselo a los lectores de una forma
creativa y diferente. He podido expresar mis opiniones sobre diferentes temas, y he podido
saber, lo que otros escritores piensan al respecto. También he comentado a cerca de otros
pensamientos, pues son enriquecedores para mi mente.

En las letras he encontrado sentimientos muy variados y en ocasiones hasta opuestos: tristeza,
alegría, miedo, suspenso, empatía, admiración, melancolía y muchos otros. Todos el resultado de
mentes brillantes, que sin miedo, se atreven a publicar en tus muros, sus ideas y sentimientos más
profundos.

Tú me has permitido enriquecerme, con los comentarios de otros autores, con las obras de otros
compañeros y con el ejemplo de escritores de gran renombre. Todo esto me ha ayudado a crecer
y mejorar mi propio estilo al escribir, y además a atreverme a escribir en distintos géneros que no
suelo utilizar.

Gracias por permitirme plasmar en tus paredes mis creaciones y por la experiencia adquirida.

Atentamente,

Astrid Avila

1 comentario:

Carmen Ovalle dijo...

Comparto la misma experiencia que has tenido en la caverna. Nos ha servido para usar nuestros sentimientos más profundos para enriquecer la mente de otros y la nuestra.