08 julio 2012

Tiempo al tiempo


Por Laura Rivas

¿Qué será más difícil?, ¿Perder a un hijo o a un hermano? Me pregunté eso tantas veces y no lo entendía hasta que lo viví.  Aún no entiendo por qué se nublo todo cuando te fuiste, se supone que vas al cielo, al paraíso, a descansar…
Que desgracia perderte así de repente; que desgracia que no me pude despedir si quiera.  Solamente en mis sueños tengo la chance de hablarte y recordarte, porque ni en las fotos he de consolarme. ¡Que desgracia!
Ahora lo único que queda es esperar el día en que nos juntemos nuevamente,  y abrazarte y decirte lo mucho que te quiero y te extrañé. Que desgracia esperar, pero hermano una cosa te aseguro, jamás te he de olvidar.

No hay comentarios: