12 febrero 2012

Cementerio Clandestino


Por Claudia Susana  López Flores


Cuando la gente caminaba por el parque Andaluz  podían sentir la fuerza de una extraña energía, nadie sabía de dónde provenía, ni que la provocaba, unos decían que el lugar había sido embrujado por una anciana que vivía a unas cuadras de ahí, otros decían que era un lugar prohibido para los mortales, pero yo puedo contarles la verdad sobre este lugar y su misteriosa energía.
Hace unos años, 10 para ser precisos, cerca de este lugar vivía una familia pequeña y humilde, el señor de la casa, llamado John Almodóvar, siempre estaba trabajando para poder traer a casa algo de comer, su esposa, la Sra. Almodóvar siempre estaba ocupada con el aseo de la casa y haciendo costuras para ganar algo de dinero extra, la pequeña Mary era la única hija de los Almodóvar, era una niña muy inteligente y alegre, pero lo que les preocupa a los Almodóvar era que nunca quiso hacer amigos, Mary disfrutaba su soledad, pero lo que más disfrutaba era jugar con sus muñecas en su lugar preferido.
Una tarde Mary estaba sentada a la mitad de su lugar favorito cuando de pronto un perro apareció, Mary asustada al verlo salió corriendo olvidando sus muñecas. Cuando llego a casa su madre le pregunto porque estaba tan asustada, Mary le contó lo sucedido y le pidió que la acompañara a recoger sus muñecas, cuando llegaron al lugar se dieron cuenta de que el perro había destrozado las muñecas, Mary se echo a llorar porque eran su tesoro más preciado, la Sra. Almodóvar las tomo y se fueron a casa. Mary decidió enterrar lo que quedaba de sus muñecas en un lugar especial, el parque Andaluz, ella iba diario a cuidar de sus muñecas y a observar como los demás niños jugaban.
 Un par de años más tarde, Mary y sus padres estaban durmiendo, cuando se inició un incendio en la  casa de al lado, ellos no se dieron cuenta de lo que pasaba hasta que el fuego ya había llegado a su casa, no pudieron escapar, ya era muy tarde, este fue el fin de la familia Almodóvar.
Si vas al parque Andaluz y sientes una extraña energía en el lugar, sabrás que es el espíritu de Mary cuidando de sus muñecas rotas.

1 comentario:

JuLio Urízar dijo...

El tema de las muñecas se parece al cuento de Gabriela Sosa. También es un cuento tétrico. Aunque la última línea me parece de más. Hubiese terminado bien en Almodóvar. La historia necesita desarrollarse un poco más, no entiendo muy bien qué tiene que ver lo del perro con todo lo demás. Cada elemento en un cuento debe estar allí por una razón, cada palabra dentro de un cuento tiene un sentido que se engloba dentro del sentido general. Cuando hay algo que sobra, se nota.